jueves, 15 de diciembre de 2011

Informe hipermedial del Trabajo Final de Redacción I


Introducción:

El tema elegido fue cómo subsistir siendo un club de barrio ya que estos no reciben el apoyo gubernamental para poder cumplir con su rol social. El objetivo es examinar la situación de esta problemática social desde todas sus aristas posibles.
En ese sentido, la investigación nace a partir del compromiso periodístico de difundir de forma pormenorizada el rol que cumplen los clubes dentro de la sociedad y del valor que eso tiene, con el correspondiente análisis de cada una de las responsabilidades involucradas: públicas y privadas.
De esta manera, luego del estudio del material se destacará a la falta de compromiso por parte del gobierno a la hora de invertir un puñado de pesos para los clubes, siendo que se invierten más de 600 millones de pesos anuales en el fútbol.
A través de los argumentos utilizados, el trabajo consistirá en convencer que la falta de sustento económico hace que muchos chicos de diferentes barrios no puedan salir de la marginalidad, la exclusion y de la calle con todo lo que eso conlleva (drogadicción, bandalismo, etc.), sumada a la falta de concientización social, elude tratar en profundidad al problema e imposibilita la concreción de una solución a largo plazo.
En resumen, se intentará concientizar a la sociedad rosarina de la importancia que tienen los clubes barriales y lo necesario que es que reciban el apoyo necesario.

Desarrollo:
Cronología de la investigación:

1- Presentación de la pre-planificación a la profesora con su consecuente aprobación.

2- Búsqueda del material acorde al tema propuesto: Clubes de barrio. Consideré como fundamental conocer en profundidad la problemática elegida antes de la realización de las entrevistas pactadas. Una buena pregunta siempre requiere de un conocimiento previo, por eso, tuve como meta primigenia embargarme al máximo en el tema para enriquecer el encuentro con los entrevistados. Al respecto, recurrí a sus antecedentes y al tiempo que llevaban dentro de la comisión directiva y qué función cumplía cada uno.

3- Producción y pactado de entrevistas:
No hubo una entrevista pactada de ante mano con alguien en particular. La idea fue avisar que iba a ir al club Atalaya y que en ese momento se realizaría la nota de manera grupal y no de manera individual. Quienes me atendieron fueron: Alejandra Borches (Tesorera) y Alejandro García (secretario).

4- Realización de la entrevista.
Alejandro García y Alejandra Borches (secretario y tesorera) fueron los que accedieron a la entrevista previo al desarrollo de una asamblea extraordinaria del club. Entrevista completa

5- Transcripción y editado de la entrevistas para la selección de las citas de autor utilizadas luego en el texto argumentativo.
6- Escritura del texto argumentativo secuencial.
7- Realización de nodos y links en el texto hipertextual.
8- Agregado de imágenes, gráficos/estadísticas a la nota correspondiente.
9- Publicación del hipertexto argumentativo una vez terminados todos los puntos del Trabajo Final de Redacción I.

Fuentes
Además de los entrevistados:

Recursos utilizados:
· Información
· Cita de autor
· Pregunta retórica
· Ejemplos


Conclusión:

Desde la función periodística, considero imprescindible concientizar a la sociedad rosarina de lo importantes que son los clubes barriales. Muchas veces uno no toma la dimensión respecto a la función que realmente cumplen. Es importante tener en cuenta que no son clubes de clases sociales altas los que se eligieron para este trabajo. Son clubes que están en barrios, o zonas de viviendas de clase media-baja.
Muchas veces se es testigo de todo lo que se vive en calle. Y uno muchos veces no entiende por qué hay gente en esa situación. Chicos que roban para comer y otros que entran en el círculo vicioso de la drogadicción.
Para intentar, al menos, evitar este tipo de situaciones están los clubes de barrio. Darle un plato de comida, ofrecerles un trabajo, y hasta integrarlos en un grupo de gente de su edad para la inclusión social para algunos no significará mucho.
La idea es que unos pocos pesos de esos más de 600 millones que se invierten en el fútbol profesional sean destinados a los clubes para tratar de que con un granito de arena podamos construir un castillo de esperanza.

Club Atlético Atalaya


El Club Atalaya, ubicado en el “barrio La Sexta”, fue fundado especialmente para practicar básquet. Nació el 11 de abril de 1934 bajo el nombre de Circulo Sportivo Social Atalaya. Su primer presidente fue Pedro Dogliotti, quien se mantuvo durante 20 años en el cargo. Éste fue figura fundamental en la creación y desarrollo del club. El 25 de marzo de 1936, Dogliotti se vio obligado a cambiar el nombre del club para poder afiliarse a la Asociación Rosarina de Básquet y poder así competir en los torneos oficiales; el nuevo nombre fue: Atalaya Club.  La primera camiseta oficial fue azul, con mangas blancas y tenía la letra 'A' en el frente (1942).
El voley, integrado por 40 chicas aproximadamente, es la actividad deportiva que más ingresos le generan al club. Paradójicamente, el básquet es la que menos dividendos aporta. Según Alejandra Borches, tesorera del club, entre sueldos de jugadores y demás gastos, “no hay ganancias”. Resulta muy extraño escuchar de boca de actuales miembros de una comisión directiva de un club, justamente de básquet, que dicha disciplina no deje patrimonio neto; y para redondear, el secretario aclaró que de no existir las donaciones nombradas anteriormente “sería muy difícil cubrir los costos de fin de mes”.
Actualmente hay alrededor de 750 socios con una cuota mensual de 45 pesos los mayores y 30 los menores. Con ese dinero, junto al del adicional que se lo cobra a cada socio por querer realizar alguna actividad deportiva, Atalaya se mantiene de pie. Tampoco hay que dejar de lado las donaciones que se hacen, que muchas veces alcanza solamente para mantener el básquet, pero las mismas no provienen del gobierno, sino de gente que quiere al club.
Además de Atalaya, Tiro Suizo y Temperley (como seguramente la mayoría de los clubes barriales) recibieron apoyos gubernamentales hasta el año 2007, y “off the record” se pudo averiguar que lo dejaron de hacer, simplemente “porque esa fue la orden”. Por eso, dirigentes de estas tres entidades coinciden en que “el trabajo en los clubes de barrio siempre fue a pulmón”.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Cómo subsistir siendo un club de barrio


Los clubes de barrio han sido históricamente espacios de encuentro y socialización, lugares donde las asambleas barriales y los debates populares tenían un por qué. Hoy, la historia de muchos de estos clubes refleja una realidad diferente. La falta de recursos económicos, intereses que buscan vender estos espacios y el signo propio de una época que parece haberlos olvidado, son algunos motivos que impulsan desde hace tiempo su progresiva desaparición.
Se viven momentos de mucha inseguridad. Hoy caminar por la calle ya no es lo que era antes. La juventud está pasando por una “crisis” donde varios factores afectan a quienes el día de mañana nos pueden llegar a representar.
La falta de armonía en hogares conlleva, muchas veces,  a que las familias se destruyan. ¿Pero cuál es la raiz de este problema y en qué deriva? Fundamentalmente el factor económico en el 90% de los casos suele ser el disparador. Esto genera que los chicos tiendan a abandonar sus hogares y a refugiarse en la calle. Entonces, surgen infinidad de situaciones aleatorias que pueden tener diferentes finales: la falta de dinero para poder alimentarse indefectiblemente deriva en robos y/o arrebatos con las consecuencias que se sabe puede llegar a tener esto. Aquí aparece el primer factor. La inseguridad.
Una vez que esto sucede, es una “bola de nieve que no deja de rodar”. Los problemas de subsistencia, como la alimentación, el frío y la falta de contencion, hacen que este mal se agrave cada vez más; y allí aparece otro factor: la drogadicción y el alcoholismo.

Se podrían enumerar miles de situaciones, pero estás dos van de la mano y necesitan una solución y alguien debe hacerse cargo.
Los clubes de barrio, aquellos que siempre cobijaron jóvenes que soñaban con triunfar en algún deporte e insertarse socialmente, ya no son lo que eran. En Rosario, desde hace algunos años (2007), los mismos dejaron de recibir  apoyo gubernamental e indefectiblemente no pudieron ser sostén de estos los niños que atraviesan esta probemática generalizada, que cada vez es más grave.
Entonces, ¿qué son y para que están hoy los clubes de barrio? Qué son y para qué están no es una respuesta que este medio pueda dar, pero está claro que deberían ser quienes intervengan este tipo de situaciones. ¿Pero cómo? Con apoyo, con sustento que debe venir de las autoridades.
En este sentido, uno de los ejemplos es el club Atalaya, que está viviendo una etapa de transición con una comisión directiva joven que asumió el 26 de mayo de 2008. Alejandra Borches, tesorera del club, dijo que cuando ocuparon el cargo, se encontraron con aproximadamente 85 mil pesos de deuda. ¿Cómo hizo este nuevo grupo de personas para superar esta dificultad? “Hubo donaciones, se vendieron publicidades, y tuvimos una de las mejores temporadas de verano donde ingresaron alrededor de 120 mil pesos”, concluyó Borches. Alejandro García, secretario, agregó: “Con orgullo podemos decir que se saldaron muchas deudas y el club cuenta con un fondo como para seguir pensando en hacer obras”.          
            Otro ingreso adicional que tiene Atalaya es la concesión del buffet que actualmente se encuentra bajo un plan de amortización. Esto quiere decir que lo que se le cobra a la persona que se hizo cargo del bar es un dinero menor al que se tendría que atesorar. García aclaró: “Cuando se termine ese plan, ingresará un dinero superior al que ingresa ahora. Es decir, estamos en una etapa de transición y reacomodamiento económico”.           
            Un tema importante a tener en cuenta, es que Atalaya es un club de básquet. Pero la paradoja que se da es que es la única actividad que le genera pérdidas al club. “Lo que ganamos en básquet solamente es lo que se genera con las recaudaciones de los partidos, pero con esta crisis mundial, las recaudaciones disminuyeron y eso nos está generando pérdida”, subrayó el secretario del club.     

            Por esta situación, un dirigente de Tiro Suizo, le confirmó a este medio que de su bolsillo tuvo que hacerse cargo de varios jóvenes que estaban socialmente marginados y que en su propio barrio eran tildados de ‘rateros’. “Yo observaba que algunos de los chicos tenían condiciones deportivas como para crecer en la sociedad, pero el entorno los absorbió, por eso decidí hacerme cargo de ellos y pagarle su cuota. De hecho, uno de ellos hoy es profe de la colonía en el verano y se gana sus propios pesitos”, declaró un dirigente que decidió quedar en el anonimato.
Lo que quedó claro, como se dijo anteriormente, es que para muy pocos funcionarios hay otro tipo de prioridades que para la mayoría no lo son. Evidentemente para esta gente, 600 millones en el fútbol profesional son más importantes que unos pocos pesos para ayudar a miles de chicos en situaciones límites.











Preplanificación:
Tema de interés periodístico: La desatención a los clubes de barrio.
Propósito: convencer.
Medio: blog (digital).
Audiencia: público general.
Tipo de texto: argumentativo.

Planificación:
Punto de partida: La falta de subsidios a los clubes de barrio.
Propósito (hipótesis): La falta de apoyo económico por parte del gobierno hace que los clubes no puedan cumplir su funcion, que es la de captar chicos de la calle y sacarlos de situaciones marginales.
Arg. 1: El gobierno no es consciente de lo necesario que es para los clubes la ayuda economica para poder cumplir sus funciones.
Arg. 2: Los clubes necesitan un sustento económico para poder subsistir.
Arg. 3: Invertir en el fútbol de primera división hoy, para el gobierno, es más importante que colborar con los clubes barriales.
Conclusión: Se reforzará la proposición en defensa de la necesaria acción conjunta de las autoridades públicas y los privados para colaborar con los clubes barriales para que estos, no sólo sigan existiendo, sino que además puedan cumplir con su rol social.